No cabe la menor duda de que los cuadros de lirios de Vincent van Gogh son una expresión vibrante y emotiva de la pasión del artista por la naturaleza, por las flores, por el color, por los lirios.

Las obras de van Gogh no son una representación más o menos fiel de una especie particular de planta, son la expresión de una visión artística.

Hoy no vamos a hablar ni de los girasoles, ni de los cipreses, ni de las rosas, ni de los tulipanes, ni…

Van Gogh es capaz de capturar la efímera belleza de las flores con una intensidad emocional única y es capaz de transmitir, con sus pinceladas, una cantidad extraordinaria de emociones y de estados de ánimo. Las pinceladas de Van Gogh no solo son audaces en términos técnicos, lo son desde el punto de vista expresivo.

Este cuaderno no es un blog de arte, pero en Jara admiramos las obras de arte que trascienden el tiempo, hay trabajos que nos cautivan por su inteligencia, por su belleza y por su profundidad emocional. Entre estas obras se encuentran los icónicos cuadros de lirios pintados por Vincent van Gogh.

La vibrante paleta y la pasión desbordante de este genio es una inspiración y un estímulo que nos anima a investigar sobre el poder evocador de las flores y a intentar reproducirlo en nuestros ramos y arreglos florales.

Otro día cogeremos apuntes de la relación con la naturaleza, en concreto con las flores y las plantas, de Velázquez, de Goya, de Sorolla, de Antonio López o de Miquel Barceló. ¿Por qué no?

Lirios

Lirios es una obra maestra del pintor postimpresionista. Este cuadro es un ejemplo impresionante, nunca mejor dicho, de la capacidad de van Gogh para transmitir emociones a través del color y de su enérgica pincelada.

Este campo con lirios se caracteriza, como decíamos, por el uso audaz del color, de las pinceladas sueltas y de una paleta intensa y vibrante de tonos complementarios y muy contrastados que crean esa sensación de luminosidad, de vitalidad, de movimiento y de vida de las flores.

Jarrón con lirios

Nuestro preferido.

Para van Gogh, los lirios no eran solo flores, eran símbolos de belleza y esperanza en medio de la oscuridad.

En este bodegón buscó un efecto armonioso y suave colocando las flores violetas sobre un fondo rosa, fondo que sirve para crear una atmósfera y resaltar la presencia de las flores.

Hay que decir que, con el tiempo, el pigmento rojo que utilizaba se ha desvanecido y, hoy, las flores en lugar de moradas son azules y el fondo ya no es tan rosa.

Se encuentra en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York.

Lirios

Esta naturaleza muerta también la pintó en el hospital psiquiátrico de Saint-Rémy.

Para él, la pintura era principalmente un estudio del color y en este caso se propuso lograr un poderoso contraste al colocar las flores violetas sobre el fondo amarillo. Como en las pinturas de esta serie, Lirios y Jarrón con lirios, las flores eran originalmente moradas.

Por cierto, ¿sabéis por qué se cortó la oreja?

Van Gogh tenía trastornos de la personalidad, trastorno bipolar con episodios de depresión e hipomanía, epilepsia y también esquizofrenia paranoica, alucinaba y sufría ataques en los que perdía el conocimiento.

Un día de diciembre de 1888, después de una intensa discusión con Gauguin, Van Gogh sufrió una de estas crisis y en medio de la polémica, con una navaja, se cortó la oreja. Se dice que se la cortó entera, pero algunas fuentes sostienen que solo se cortó el lóbulo.

Él nunca pudo recordar nada sobre el suceso.

A los que habéis llegado al final de este apunte, deciros que en Floristería Jara intentamos transmitir en nuestros ramos y arreglos la misma vitalidad, intensidad y emoción que estos lirios, que hacemos las cosas lo mejor que sabemos y podemos y que, algún día, lo lograremos.

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