El Ficus lyrata, también conocido como el Ficus lira o Ficus hoja de violín, es una planta perenne originaria de África occidental, especialmente de las regiones tropicales de Sierra Leona, Costa de Marfil y Liberia. Se caracteriza por sus hojas grandes y distintivas que pueden crecer hasta alcanzar un tamaño impresionante.
Estas hojas tienen una forma que recuerda a un violín o a una lira, de ahí su nombre común. Son gruesas, coriáceas y brillantes, con venas prominentes que se extienden desde la base hasta los bordes. Normalmente son de color verde oscuro, aunque pueden tener tonalidades más claras en la parte inferior de la hoja.
El Ficus lyrata es una planta de interior muy popular debido a su aspecto exótico y su relativa facilidad de cuidado. Prefiere lugares bien iluminados, pero no debe estar expuesto a la luz solar directa durante largos períodos, ya que esto puede quemar sus hojas. Además, requiere un riego regular, asegurándose de no dejar que la tierra se seque por completo entre riegos.
En su entorno natural, puede crecer hasta convertirse en un árbol de tamaño considerable, pero en interiores se mantiene como una planta de tamaño mediano, a menos que se le brinde espacio y condiciones óptimas para crecer más.
Es importante mencionar que el Ficus lyrata es tóxico para mascotas como gatos y perros si lo ingieren, por lo que debe mantenerse fuera de su alcance. Sin embargo, para los humanos, no representa un riesgo significativo si se manipula con cuidado.
El Ficus lira es relativamente resistente a plagas y enfermedades, pero puede ser susceptible a cochinillas, pulgones y araña roja. Si se detectan estas plagas, es importante tratar la planta con un insecticida adecuado.