El cuidado adecuado de tus plantas de interior en verano puede marcar la diferencia entre una planta marchita y una que florezca con vigor. Ajustando el riego, controlando la luz y la temperatura y proporcionando los nutrientes necesarios puedes asegurarte de que tus plantas se mantengan saludables y hermosas durante toda la temporada.

Las olas de calor que suelen producirse en verano pueden tener un impacto significativo en las plantas de interior que son especialmente vulnerables debido a su entorno controlado.

En España, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) define como ola de calor un período de al menos tres días consecutivos en que al menos el 10 % de las estaciones meteorológicas consideradas registren temperaturas ambientales por encima del percentil del 95 % de su serie de temperaturas máximas diarias de los meses de julio y agosto del periodo 1971-2000.​

Durante estos periodos de temperaturas extremas las plantas de interior pueden sufrir estrés térmico, se marchitan, aparecen hojas quemadas o secas y se produce un crecimiento general ralentizado.

El calor excesivo acelera la evaporación del agua del suelo haciendo que las plantas necesiten riegos más frecuentes para mantenerse hidratadas. Además, el aire seco generado por sistemas de aire acondicionado puede reducir la humedad ambiental esencial para muchas plantas de interior aumentando el riesgo de plagas como ácaros y pulgones.

Para proteger tus plantas durante una ola de calor es crucial mantener una hidratación adecuada, aumentar la humedad ambiental mediante rociadores o humidificadores y evitar la exposición directa a la luz solar intensa moviéndolas a áreas más sombreadas.

Con estos cuidados de tus plantas de interior puedes ayudar a tus plantas a resistir mejor las condiciones adversas y mantenerse saludables.

En Floristería Jara estamos para ayudarte con cualquier consulta sobre el cuidado de tus plantas de interior.

¡Visítanos si necesitas algún consejo más específico o algún producto que te ayude a mantener tus plantas felices este verano!

Cuidados básicos de tus plantas de interior

Ajusta el Riego

El calor del verano puede aumentar la evaporación del agua en la tierra de tus plantas por lo que es crucial ajustar el riego.

Revisa la tierra de tus plantas con frecuencia. Si los primeros centímetros de la tierra están secos es hora de regar. Asegúrate de que el agua drene bien para evitar el encharcamiento y o que se corrompan las raíces.

Humedad Ambiental

El aire seco puede ser un problema durante el verano especialmente si usas aire acondicionado.

Aumenta la humedad alrededor de tus plantas rociándolas con agua regularmente, colocando un humidificador cerca o agrupando las plantas para crear un microclima húmedo.

Luz Solar

Las plantas de interior necesitan luz, pero el sol directo del verano puede ser demasiado fuerte.

Protege tus plantas del sol directo colocando cortinas ligeras o moviéndolas a áreas con luz indirecta. Observa las hojas para detectar signos de quemaduras solares como manchas marrones o bordes quemados.

Temperatura

Las temperaturas extremas pueden estresar a tus plantas.

Mantén una temperatura constante y agradable dentro de casa. Evita colocar tus plantas cerca de ventanas que reciben luz directa durante el mediodía, radiadores o aparatos de aire acondicionado que pueden causar fluctuaciones de temperatura.

Fertilización

El verano es una época de crecimiento activo para muchas plantas por lo que necesitarán nutrientes adicionales.

Fertiliza tus plantas cada dos o cuatro semanas con un fertilizante balanceado y diluido para promover un crecimiento saludable. No sobrealimentes, ya que el exceso de fertilizante puede dañar las raíces.

Poda y Limpieza

Eliminar las hojas muertas o amarillentas ayuda a mantener tus plantas sanas y atractivas.

Podar regularmente tus plantas ayuda a mantener su forma y fomenta un crecimiento más denso. Limpia las hojas con un paño húmedo para eliminar el polvo y permitir una mejor fotosíntesis.

Vigilancia de Plagas

El calor del verano puede atraer plagas como ácaros, pulgones y cochinillas.

Inspecciona regularmente tus plantas para detectar signos de plagas. Si encuentras alguna, trata la planta con un jabón insecticida o un insecticida específico para plantas de interior.

Cambio de Maceta

Si notas que tus plantas han crecido mucho podría ser un buen momento para trasplantarlas.

Elige una maceta un poco más grande y asegúrate de usar tierra fresca y nutritiva. Esto dará a las raíces más espacio para crecer y promoverá una planta más saludable.

Tu floristería en Salamanca