El Ave del Paraíso, conocida como flor de pájaro, planta de pájaros de fuego o flor grulla y científicamente como Strelitzia reginae, es una planta herbácea originaria de Sudáfrica que se caracteriza por sus llamativas flores de colores vibrantes que recuerdan la forma de un ave tropical.
La Strelitzia reginae tiene un follaje verde intenso y denso que se asemeja a grandes hojas de plátano.
Junto con las orquídeas, las heliconias y los anturios, es una de las plantas tropicales más populares.
Las hojas son grandes, lanceoladas y pueden alcanzar alturas de hasta 1,5 metros. El follaje es perenne y proporciona un fondo verde exuberante para las impresionantes flores.
Las flores del Ave del Paraíso son, quizás, su característica más distintiva. Son únicas y tienen una forma que se asemeja a la cabeza de un ave exótica, de ahí su nombre común.
Están formadas por una serie de brácteas naranjas, violetas y azules que se asemejan a un pico y una cresta de plumas y pueden durar varias semanas.
Crece tanto en interiores como en exteriores en climas cálidos y sin heladas.
Al aire libre, puede alcanzar alturas de hasta 1,5 a 2 metros, mientras que en interiores su crecimiento se ve limitado por la maceta y las condiciones de luz.
Esta planta prefiere la luz sin estar expuesta a ella directamente, pero también puede tolerar cierta sombra.
Requiere un suelo bien drenado y riego regular durante la temporada de crecimiento, pero debe permitirse que el suelo se seque ligeramente entre riegos.
Cuidados
La planta Ave del Paraíso es resistente, pero requiere unos cuidados especiales para que se mantenga saludable y tenga un crecimiento óptimo.
Tiene unas raíces fuertes y un crecimiento acelerado, es adecuado trasplantarla una vez al año en una maceta mayor que le permita desarrollarse bien.
Florece prácticamente en todos los meses del año. Sin embargo, a principios de primavera, entre los meses de marzo y abril, la floración se intensifica, puede mantenerse en perfectas condiciones durante más de dos semanas.
Al ser una planta tropical, el Ave del Paraíso necesita recibir luz solar al menos 4 horas diarias, pero, también, que tenga sombra en los meses más calurosos. Una temperatura media recomendable está entre lo 15º y 20º C. El frío es su gran enemigo, nunca debemos exponerla a temperaturas inferiores a 5º C.
La humedad ambiental es otro de los aspectos importantes. Es bueno que esté en torno al 70%.
En el interior de nuestros hogares podemos simular esta atmósfera tropical pulverizando sus hojas o colocando un plato con agua bajo la maceta y separado de nuestra planta con grava o áridos decorativos.
Las plantas que se cosechan en suelos con un pH moderadamente ácido y ricos en calcio, magnesio y potasio crecen con un mayor número de flores y, al cortar la flor, estas se mantiene más tiempo en el florero. Lo ideal es contar con un sustrato con un pH de 7,5.
Responde bien a los abonos con estiércol, debes hacerlo cada 20 días, es una planta que agradece la materia orgánica.
Hay que podarla con regularidad, cuando aparezcan partes muertas o marchitas es conveniente eliminarlas para ayudar a que se regenere.
En nuestro cuaderno o blog también podrás encontrar una serie de apuntes con información útil y entretenida sobre otras plantas, sus flores y sus cuidados.